Luisa Sirvent, diseñadora e ilustradora afincada en Barcelona y fundadora de su propio estudio de diseño en 2016 - al que bautizó como Vektorama -admite en una entrevista que, a pesar de buscar siempre su propio estilo y dedicarse con pasión al diseño gráfico ilustrado, es "muy difícil romper con lo establecido, aunque sea de una forma etérea".

Sirvent se declara seguidora del Grupo Memphis (un movimiento de arquitectura y diseño industrial surgido en los Ochenta), del diseñador gráfico Wiktor Gorka y del pintor el Greco, porque "cada uno en su estilo, rompieron" los cánones.

Aunque le cuesta trabajo elegir cuál de sus diseños ha sido rupturista y rompedor del status quo, se decanta por un proyecto personal antiguo llamado “Pégate un miembro”, con el que creo tatuajes de quita y pon. "Obtuve muchos tipos de opiniones, algunas muy graciosas", afirma Sirvent.

A ese proyecto se han ido sumando muchos más: destacan, por ejemplo, el proyecto para ilustrar las postales “Save the artic” para Greenpeace o la creación de un universo de iconografía para la aplicación móvil Smartee. Entre sus últimas colaboraciones, también podemos citar la que ha realizado para la marca de tecnología SPC, con la que confiesa que le ha pasado una cosa que “no le suele pasar”, que es haber tenido “mucha carta blanca” para crear sus dibujos. “Ellos me han marcado tres palabras clave y yo de ahí he dejado volar mi imaginación”, cuenta Sirvent.

Para poder realizar su trabajo, asegura también que es “súper importante” conocer a la gente que está detrás de la compañía que encarga el diseño y conocer el producto y el espíritu de la marca. “Las ilustraciones (para SPC) tienen mucha energía, son muy vitales y divertidas”, explica Sirvent al mismo tiempo que añade que, aunque cada diseño sea distinto, todos “tienen un hilo conductor” que permitiría hacer una ilustración gigante con todos los diseños y que quedara “genial”.

¿Quieres saber más sobre su estilo, sus proyectos y su trabajo para SPC? Ella misma nos da todas las respuestas:

 

 

El inconformismo puntual, beneficioso para ayudar a mejorar

La fundadora de Vektorama no se considera una persona inconformista, pero admite que alguna vez en la vida "sí lo ha sido, sobre todo en el ámbito laboral". "Considero que el inconformismo de una forma puntual puede ser beneficioso, porque te ayuda a mejorar y tener claro lo que quieres en esta vida", reflexiona.

Sirvent recuerda que Vektorama nació "hace muchos años", cuando se encontraba estudiando un máster de diseño web y uno de los ejercicios fue crear un dominio para alojar una primera web y pensó que la marca Vektorama "sería un buen nombre".

Pero el "salto", rememora, lo dio cuando concluyó su último empleo por cuenta ajena: "tenía algunos proyectos por mi cuenta y decidí que estaba en el momento para hacerlo, de intentar ser mi propio jefe”, confiesa.

Una de las cosas que primero sintió al dar ese primer paso en la fundación de su propio negocio reconoce que fue una mezcla de sentimientos encontrados, "por un lado libertad y emoción" y por otro miedo e incertidumbre. "Los cambios siempre dan miedo, no sabes qué es lo que va a pasar", explica.

Vektorama: creación de un estilo de diseño propio

Sirvent cuenta que no tuvo claro que se quería dedicar al mundo del diseño gráfico hasta el último día de instituto, cuando su profesora de dibujo técnico de geometría le "abrió la mente a otro tipo de expresión gráfica". "Ese fue el momento en el que empezó mi pasión por la ilustración vectorial y el diseño gráfico. Me sigue pareciendo alucinante", recalca.

Cuando le preguntas a qué se dedica, lo tiene claro: "digo que lo que hago es diseño gráfico ilustrado, creo que es la definición perfecta. En mis ilustraciones hay mucho diseño gráfico y en mis encargos de diseño suele haber toques de ilustración".

 

Así, Sirvent, a la que siempre le había encantado dibujar, pero no lo veía como algo a lo que dedicarse profesionalmente, ahora, "como cualquier persona trabajadora", se (im)pone sus horarios en el día a día e intenta tener una rutina de trabajo y unos horarios fijos. "Para mí es muy importante, al final gestionas muchas cosas y tienes que tener un orden, la cosa no acaba cuando sales de la oficina", señala.

Sus diseños empiezan en papel, boceteando y apuntando ideas, y acaban en soporte digital. Aún así, la elección "depende del proyecto, lo que necesites expresar y cómo", concreta. “Para mi no existe uno sin el otro, en mi forma de trabajar utilizo los dos. He hecho proyectos digitales que se van a imprimir y diseños hechos a mano para soportes digitales".

¿Y el momento de la inspiración?

Sirvent cuenta que si la inspiración llega en un momento raro suele apuntar las ideas en una libreta, ya que para trabajar es "totalmente diurna"...a no ser que el proyecto requiera trasnochar alguna vez.

Lo malo es que la inspiración "no viene por sí sola y muchas veces no está cuando la necesitas", por lo que cree que que también hay algunos trucos para ejercitarla y que así sea más fácil de encontrar. A ella lo que le funciona para buscar la creatividad que necesita es, confiesa, irse "al monte y pegarse una buena caminata".

Sin embargo, a pesar de buscar la inspiración en pantalla o en papel, en la montaña o en la ciudad y de noche o de día, lo que convierte en especial haber fundado Vektorama es no saber "qué tipo de encargo va a ser el siguiente", admite Sirvent.

Por eso, al abordar los nuevos “retos” que le planteen sus próximos encargos, su punto de partida será siempre echar a volar la imaginación para captar ese espíritu que busca en cada uno de sus proyectos.