Todos estamos cada vez más sensibilizados hacia la necesidad de cuidar el medio ambiente para frenar los efectos del calentamiento global. A la hora de reducir la huella de carbono de los desplazamientos diarios en vehículo privado a nuestros lugares de trabajo, una de las medidas más eficaces sería reforzar el teletrabajo. SPC ofrece algunas pautas tecnológicas que pueden contribuir a garantizar su eficacia.

La Comisión Europea creó la Semana Europea de la Movilidad como campaña de sensibilización hacia el uso del transporte público, la recuperación de espacios para peatones y ciclistas y, en general, la apuesta por una movilidad urbana que reduzca los niveles de contaminación que se generan a diario en las ciudades. Algo por lo que sería mucho más sencillo apostar si se fomentara el uso del teletrabajo. Según un estudio realizado por el Instituto de Ciencia y tecnología Ambientales de la Universidad Autónoma de Barcelona, si se generalizara el teletrabajo dos, tres o cuatro días a la semana, se reducirían, respectivamente, un 4%, un 8% y un 10% los niveles de dióxido de nitrógeno del aire.

 

Para garantizar que el teletrabajo se puede realizar de forma fluida y con plenas garantías técnicas, SPC, la compañía tecnológica española especializada en el desarrollo de productos de electrónica de consumo, ofrece unas cuantas pautas a través de su división para empresas SPC for Business, especializada en las soluciones de comunicación unificadas y de colaboración.

 

1. En casa, un equipo de videoconferencia adaptable

A pesar de que nos hemos acostumbrado a utilizar el teléfono móvil para teletrabajar, resulta incómodo a la hora de hacer videollamadas de trabajo, sobre todo de larga duración. Una buena alternativa es utilizar una tablet, que, sobre un soporte, permite ver cómodamente a compañeros, jefes o clientes, además de escucharlos a la perfección con los altavoces incorporados, que cada vez ofrecen una mayor calidad de sonido.

 

2. En la oficina, salas de reunión para trabajo híbrido

La apuesta por el teletrabajo puede llevar a que, en el momento en que sea necesario reunir al equipo para planificar o valorar un trabajo realizado, alguno de los miembros se encuentre en casa. Para paliar dicha situación, es importante contar en la oficina con una sala preparada con un equipo profesional de videoconferencia con funciones de alto rendimiento como YEALINK MEETINGBOARD 65. Con gran pantalla táctil que incorpora cámara 4K, altavoces y micrófono, este modelo es compatible con una aplicación de comunicación tan extendida como Microsoft Teams.

 

3. Auriculares con reducción de ruido para llamadas importantes

Se trabaje desde la oficina o en casa, a la hora de hablar por teléfono con clientes o incluso con nuestros superiores, es habitual que se haga difícil entenderse por el ruido de fondo o la mala calidad de sonido. La mejor forma de evitarlo es utilizar unos auriculares Bluetooth que incorporen algún tipo de tecnología de reducción de ruido: hay muchos modelos que la incluye, y que son capaces de suavizar el barullo ambiental con notable eficacia.

 

4. El trabajo de todos, monitoreado en tiempo real

La dispersión de los lugares de trabajo hace cada vez menos útil depender del hardware para almacenar datos de trabajo, de ahí que se apueste por soluciones en la nube que faciliten la colaboración y compartir archivos. Pero eso también provoca que tanto los ordenadores como las propias redes estén mucho más expuestas a todo tipo de ciberpeligros, de ahí que sea recomendable implementar soluciones como YEALINK GESTIÓN REMOTA. Esta permite gestionar los dispositivos de toda una empresa. Así se centralizan los permisos con los que cuenta cada trabajador y se ejecutan, de ser necesarios, análisis en tiempo real o herramientas de diagnóstico para prevenir infecciones o fugas de datos.

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