Greta Thunberg pasó en tan solo unos meses de ser una de las hijas de la cantante de ópera sueca Lanea Ernman y del actor Svante Thunberg a ser una de las personas más influyentes a nivel mundial en la lucha contra el cambio climático.

En agosto de 2018, cuando tenía quince años, Thunberg empezó a dedicar parte de su tiempo restante tras la jornada escolar a manifestarse frente al parlamento sueco, sosteniendo un cartel que pedía una acción climática más fuerte. Pronto, otros estudiantes participaron en protestas similares y juntos organizaron un movimiento de huelga climática escolar con el nombre de Viernes para el Futuro (del inglés, Fridays for Future).

1. Depresión, autismo, mutismo selectivo y síndrome de Asperger

Thunberg es conocida por su manera contundente​ de hablar y de defender sus principios, ​ tanto en público como dirigiéndose a los líderes y asambleas políticas demandando una acción inmediata para abordar lo que ella describe como la «crisis climática». Esta persuasión le llevo a Thunberg a convencer también a sus padres para que adoptaran nuevos de estilo de vida respetuosos con el medio ambiente. Para reducir su propia huella de carbono dejaron, por poner tan solo un par de ejemplos, de viajar en avión y de comer carne.

Lo que no tantos saben es que todo esto empezó cuando Thunberg escuchó por primera vez sobre el cambio climático en 2011, a la edad de ocho años. En ese momento, Greta no podía entender por qué se estaba haciendo tan poco al respecto.​ Tres años más tarde, se vio afectada por una depresión y dejó de hablar y comer. Finalmente, le diagnosticaron con síndrome de Asperger, trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)​ y mutismo selectivo. ​

2. Efecto Greta Thunberg

Después de las elecciones generales de su país, Suecia, de septiembre de 2019, Thunberg continuó protestando cada viernes, lo cual llamó la atención a nivel internacional e inspiró a jóvenes estudiantes de todo el mundo a participar en huelgas estudiantiles. Desde diciembre de 2018, se han sumado a estas manifestaciones jóvenes de 270 ciudades en varios países de los 5 continentes​.

La joven sueca ha sido fuente de inspiración de varios de sus compañeros en edad escolar en lo que se ha descrito como el «efecto Greta Thunberg». En verano de 2019, según informó Nielsen Book Research, se duplicó el número de libros para niños publicados sobre la crisis climática, con un aumento similar en las ventas de tales libros. Los editores atribuyen esto al «efecto Greta Thunberg».

Tal efecto se extiende también hacia fortunas de ricos filántropos e inversores de los Estados Unidos, que han donado más de medio millón de dólares para apoyar a distintos grupos de huelga escolar.

El último presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, informó que en el próximo período financiero de 2021 a 2027, 1 de cada 4 euros gastados dentro del presupuesto de la UE se destinará a medidas para mitigar el cambio climático.​

Los problemas climáticos también jugaron un papel importante en las elecciones europeas de mayo de 2019, ya que los partidos verdes casi duplicaron su voto para terminar en segundo lugar con un 21% pudiendo ejercer, cada vez más, influencia en el nuevo parlamento europeo. ​

3. Sillón de piel y viajes en primera clase

Como casi todas las personas, Greta tiene seguidores y, en igual medida, detractores. La familia Thunderg también ha sido objeto de críticas, controversias y acusaciones.

Una de las más espinosas y con mayor trascendencia se refiere a un sillón de piel que mostraba una foto de madre e hija en el salón de su casa. No pasó mucho tiempo hasta que las primeras informaciones salieron en la red apuntando a que el citado sillón valía más de 6000 euros y era obra del fallecido diseñador estadounidense Charles Eames. Estaba construido en cuero y maderas raras, lo que para sus oponentes evidenciaba que para fabricarlo se necesitaron piel de animal y numerosos árboles. Este hecho les empujó a calificar la actitud de la activista de hipócrita.

Otra de las polémicas en las que se ha visto envuelta Greta tiene que ver con una foto que publicó en sus redes sociales de ella misma en un supuesto tren atestado de pasajeros de la compañía alemana de trenes Deutsche Bahn.

 

Traveling on overcrowded trains through Germany. And I’m finally on my way home! pic.twitter.com/ssfLCPsR8o

— Greta Thunberg (@GretaThunberg) December 14, 2019

 

La compañía contesto al tuit de Greta de la siguiente manera: «Querida Greta, gracias por apoyarnos a los ferroviarios en la lucha contra el cambio climático. Nos alegró que viajaras con nosotros el sábado en ICE 74. Y eso es con electricidad 100% sostenible. Hubiera sido aún más agradable, si también hubieras informado de cuán amable y competente fuiste atendida por nuestro equipo en tu asiento en primera clase».

4. Greta abandona la Marcha por el Clima de Madrid

Una de sus más recientes apariciones públicas fue precisamente en nuestro país: la clausura de la Marcha por el Clima de Madrid que se celebró el 6 de diciembre de 2019 con motivo de la Cumbre del Clima de la ONU que se celebraba en la capital.

La joven activista de 16 años Greta Thunberg tuvo que abandonar la marcha aconsejada por su equipo de seguridad debido a la aglomeración de personas que había a su alrededor y que le impedían avanzar.

Thunberg llegó a la capital española tras 36 días de viaje poco contaminante en coche eléctrico, barco y tren. Para llegar, atravesó Estados Unidos en coche eléctrico y tren para realizar, a continuación, la travesía de 21 días hasta Europa a bordo de un catamarán de una pareja de australianos millonarios (lo que también le ha valido unas cuantas críticas) que se dedican a publicar sus aventuras en alta mar en Youtube.

Su periplo finalizó con un viaje en tren hasta Madrid. No pudo ser este un viaje con cero emisiones ya que las vías del tren no estaban por completo electrificadas. Fue necesario usar el motor diésel durante dos horas del trayecto, justamente entre la frontera portuguesa y Salamanca, a lo largo de unos 200 kilómetros.

5. Una niña de Sudán del Sur a Greta: ¿Que te han robado la infancia?... Te la cambiamos

Un medio digital publicó hace poco lo que parece ser una carta que una niña de Sudán del Sur dedica a Greta Thunberg explicándole los problemas que ella y otras niñas como ella sufren a diario en campamento para desplazados. La carta, que empieza con una primera comparativa entre vivir en Suecia y en el campamento de desplazados, está cargada de emoción, reproches e irónicos símiles entre la vida de Greta y la de esta joven de sudanesa:

1.- “Perdona, pero hay que tener poca vergüenza para decir que te han robado la infancia…”.

2.- “Mira, Greta: quiero pensar que, simplemente, eres un títere en manos de extraños intereses…”

3.- “…a quienes nos han robado la infancia es a nosotros…”

4.- “…nos encantaría tener muchas más vacas echando pedos a la atmósfera todo el día porque así tendríamos acceso a las proteínas que puedan impedir la muerte por desnutrición de millones de nuestros niños.”

5.- “…te hemos reservado un hueco en la tienda número 1.587 de nuestro campamento de refugiados para que puedas descansar un rato sin contaminar…”

6.- “…para no contaminar el medio ambiente no traigas el móvil, ni gafas, ni compresas, ni cepillo de dientes, ni dada que en su proceso de fabricación haya contribuido a emitir CO2”.

La misiva concluye con un: “¿Que te han robado la infancia? No te preocupes, porque todas nosotras para hacerte un favor: TE LA CAMBIAMOS.”